Perfect sense (2011)
Dirección: David Mackenzie
Reparto: Ewan McGregor, Eva Green, Connie Nielsen, Ewen Bremner, Stephen Dillane, Denis Lawson, Anamaria Marinca
SINOPSIS
La tierra se enfrenta a una epidemia global totalmente desconocida. Sin saber por qué, todos los seres humanos están perdiendo sus sentidos: el olfato, el gusto, el oído, y por último la vista. Un chef conoce en medio de todo este desconcierto a una viróloga y el amor surge entre ellos de forma tan intensa como el caos que los rodea. Ambos tratarán de hacer frente a la evolución de la epidemia, mientras su amor crece a la misma velocidad que el virus, cerrando poco a poco las puertas a un final feliz.
OPINIÓN PERSONAL DE «PERFECT SENSE»
Hoy quiero hablarte de una película de hace unos añitos, pero que revisité hace poco (ya sabes que ahora escojo más al detalle lo que veo) porque tenía ganas de analizarla más al detalle. «Perfect sense» fue un bello descubrimiento en su momento y a día de hoy me ha vuelto a emocionar al verla de nuevo. Sí, he llorado. Porque es una historia para llorar, al menos a mí así me lo parece.

Empezaré diciéndote que Ewan McGregor es uno de mis actores favoritos, por lo que ya el punto a favor para visionarla lo tenía. Y eso no implica que sea imparcial, puesto que he visto cosas de Ewan que no me han gustado nada, la verdad. Su compañera de reparto, Eva Green, me parece una muy respetable actriz que conocí en «Soñadores» y luego en la estupenda serie «Penny Dreadful». O sea, que la idea de verla en su momento empezaba bien. No es una película de mucha duración (no llega a los noventa minutos), pero tras verla, sientes que no necesitas que esa historia se alargue tontamente. Cosa que por desgracia ocurre en muchas de las películas de hoy en día.
La idea de una pandemia mundial (dejando de lado la que hemos vivido por desgracia hace poco) siempre va unida a la idea del fin del mundo. Y eso, si nos paramos a pensar, nos transporta a la idea de un buen blockbuster lleno de efectos especiales, historias de superación, héroes y antihéroes y toda esa vaina. Pero esta película, como reza su epígrafe bajo el título, es una moderna historia de amor. Por lo que ya sabes que esto no va a ser un «Armageddon». El mundo va camino de un desastre a nivel humano, en el que las fuerzas de la naturaleza no tienen nada que ver. Un virus ataca a los seres humanos y estos van perdiendo progresivamente todos sus sentidos. Uno tras otro, irremediablemente. Y dos extraños cruzan sus caminos, se enamoran y se enfrentan a esa nueva realidad que no para de cambiar. Y por desgracia para peor. Cada nueva falta de sentidos, provoca en ellos nuevas reacciones, a veces buenas, a veces malas, pero demostrando que el ser humano trata de aclimatarse a los cambios de diferentes formas. Aunque a veces no sean las correctas.

Los parlamentos que tienen los protagonistas se degustan con el placer de analizar cada palabra, cada frase, cada pensamiento. Al ser una cinta de duración excesivamente corta, cada momento está estructurado para no ser alargado más de lo necesario. Expresar la idea principal y no perderse en eufemismos baratos. La película es directa y concisa. No se anda con medias tintas y va a l grano desde el minuto uno. Y eso es de agradecer. Al menos para mí.
Por mucho que los eruditos quieran buscarle tres pies al gato y sus detractores quieran tacharla de absurda, lo cierto es que «Perfect sense» es una historia de amor hacia la vida. Una historia que nos demuestra que los sentidos son importantes, pero más aún lo son los sentimientos. Podemos perder todos los sentidos. Podemos perdernos en la oscuridad y el caos. Pero si el amor nos llena, somos capaces de seguir adelante. Hasta el fin que nos depare la vida. Y eso es lo que demuestran los protagonistas en ese camino que recorren juntos, mientras la pérdida de cada uno de sus sentidos, les modifica, les transforma, les redirige por un nuevo camino.
Buena banda sonora, estupenda fotografía, dos protagonistas que conectan desde la primera secuencia en la que aparecen juntos y un final emotivo que te rompe el corazón. Es de esas películas que tras terminar de verla, debes dejar pasar un tiempo para que todo lo que te ha removido por dentro, se vaya colocando de nuevo en su sitio. Una preciosidad, sin duda.
Así que para terminar, simplemente invitarte a que descubras esta película, si no la conocías, y descubras una historia de amor fuera de lo común. ¡Nos vemos la próxima semana!
¿Conocías esta película? ¿Cómo afrontarías tú una epidemia de este calibre? ¡Déjame tu comentario más abajo!