Moulin Rouge (2001)
Dirección: Baz Luhrman
Reparto: Nicole Kidman, Ewan McGregor, John Leguizamo, Jim Broadbent y Richard Roxburgh
SINOPSIS
En el bohemio París de 1900, el lugar de moda es el Moulin Rouge, donde su estrella más fulgurante es la preciosa Satine. Entre actuaciones llenas de sensualidad y erotismo, la joven Satine sueña con triunfar como actriz. Un joven escritor se cruza en su camino, al mismo tiempo que un acaudalado duque la reclama a cambio de financiación para la renovación del Moulin Rouge. Cuando el amor no es una opción, solo quedan las mentiras, la traición, los secretos y el dolor.
OPINIÓN PERSONAL DE «MOULIN ROUGE»
Pues hoy me pongo en modo musical y traigo mi crítica acerca de uno de los mayores éxitos del 2001, así como de su director: Moulin Rouge. Tras el éxito de Romeo + Julieta, Baz Luhrman puso toda la carne en el asador con un proyecto tan ambicioso como pretencioso. Con su película anterior había combinado a la perfección a Shakespeare con una estética moderna, consiguiendo traer el verso a los más alejados del mundo teatral. Pues bien, con esta nueva cinta, el señor Luhrman nos quiso mezclar los mejores tiempos del famosísimo Moulin Rouge con grandes éxitos musicales de nuestra época. Y lo consiguió con muy buena nota.

La historia, siendo ambientada en la época del mayor esplendor del Moulin Rouge, ya apuntaba alto; esa decadencia mezclada con grandes dosis de glamour solo podía dar como resultado una pieza cinematográfica sublime. Y el director, que sabe como llevar este tipo de historias, borda su dirección creando una cinta que se anima desde el minuto dos. Y digo desde el minuto dos, porque solo hay una pequeña pega que le pongo al guión: que me cuenten el final en el minuto uno. Desde mi punto de vista, habría sido más efectista no conocer el desenlace, pero tampoco le resta su status de clásico al instante.
Nicole Kidman, inmersa en dos proyectos tan diferentes como el que nos ocupa y “Los otros” de Amenabar, culminó un año redondo gracias a dos interpretaciones tan opuestas que sorprende lo camaleónica que puede llegar a ser esta mujer. Ewan McGregor deleita con su torrente vocal, mostrando que es un actor multifuncional como pocos. Consigue ser el galán de la historia sin presumir de ello; con una belleza especial, se gana el corazón de la protagonista así como el corazón del público. El Duque y Zidler, asi como Tolouse y sus compañeros, no hacen si no afianzar un reparto sobresaliente, con una estética kitsch y pomposa a partes iguales que encandila al espectador.
La fotografía (aunque en algunas escenas usando los efectos especiales, obvio) es de una belleza increíble, colorida y mágica. Todo rezuma sensualidad y ese toque bohemio contrastando con la opulencia del dinero cedido por el gran Duque para la renovación del Moulin Rouge son fabulosamente magníficos. El elefante donde vive Satine es de una belleza increíble (por lo visto al final lo destruyeron, una lástima) y refleja la opulencia que las grandes estrellas de aquella época disfrutaban. Cortesanas admiradas y veneradas como diosas, pero atadas como esclavas.

La música: versionando temas musicales contemporáneos y dándoles un toque “Moulinesco”, revive la magia por los musicales de antaño, cuasi olvidados o ninguneados hasta entonces. Probablemente si la estética de la película no hubiera sido tan llamativa, el hecho de ser un musical hubiera pasado a un segundo plano; pero gracias a ello, el cine musical tomó importancia de nuevo, abriéndose paso poco a poco y demostrando que quedaban grandes cosas por hacer. Y quince años después, se puede afirmar que esta película fue una de las precursoras del boom musical de esta década y media pasada.
Moulin Rouge es una de esas películas que casi todo el mundo ha visto, es cierto, pero no deja de ser un espectáculo el verla de nuevo, y sobre todo si consigues a tu lado a alguien que aun no la haya visto. Y para mí, como punto súper extra, vuelvo a ver a la maravillosa Kylie Minogue haciendo del Hada Verde, fruto de la ingesta de absenta por parte de los bohemios. Una maravilla de historia filmada con gran maestría.