LOST BOYS & FAIRIES

Lost boys & fairies (2024)


Creación: Dafydd James y James Kent

Reparto: Sion Daniel Young, Fra Fee, Elizabeth Berrington, Arwel Gruffydd, Shaheen Jafargholi, Maria Doyle Kennedy, Leo Harris

Temporadas: 1

Episodios: 3

SINOPSIS

Gabriel y Andy son pareja desde hace tiempo y desean adoptar un niño. Su caso no es tan fácil como el de cualquier pareja heterosexual, pero ellos están dispuestos a conseguirlo. Por su parte, Gabriel tiene que lidiar con sus demonios internos, su pasado turbulento y su propia negación a querer hacerse cargo de un niño pequeño para criarlo.

OPINIÓN PERSONAL DE «LOST BOYS & FAIRIES»

Hoy te traigo de nuevo una producción de la BBC (la televisión británica) porque no puedes dejar de ver esta maravilla cinematográfica. Esta cadena, como siempre, ofreciendo unas historias hermosamente filmadas, soberbiamente interpretadas y con una factura técnica exquisita. Al igual que ocurrió con “Man in an orange shirt”, aquí volvemos a la temática LGTB en un caso de adopción y todo el recorrido que deben pasar los futuros padres. A eso hay que sumarle la infancia y adolescencia de uno de ellos, que es el leit motiv del presente con el pasado. Y como ese pasado nos condiciona sin saberlo hasta que es necesario hacer frente a él.

Antes que nada, debo decir que no me esperaba que en una historia tan corta (tres episodios de menos de una hora cada uno) podía existir un giro como el que he visto. No me esperaba todo lo que ocurre, puesto que no había leído ni visto nada acerca de la historia de Gabriel y Andy. Y si te animas a verla, te recomiendo que no investigues mucho, por los spoilers que muchas veces se cuelan sin avisar.

Uno de los sentimientos más fuertes que tuve mientras veía esta serie, era el hecho de entender a Gabriel en la mayoría de sus acciones (o de sus pensamientos), porque es difícil no sentirse identificado. Y me refiero a todo el miedo con el que ha crecido, dentro y fuera de su hogar. Siempre digo que a día de hoy todavía existe discriminación, pero es cierto que ni por asomo a lo que ocurría hacía años. Por ejemplo cuando yo era joven. El miedo, las críticas, el rechazo familiar, todo era un continuo caos mental.

Por lo que es un hecho que con una probabilidad del cien por cien, ninguna persona del colectivo ha tenido un crecimiento sano mentalmente con respecto a su sexualidad. Y hablo de la edad de los personajes de esta serie hacia arriba, no hacia los más jóvenes. Por lo que consigues empatizar no con lo que ha hecho, o con lo que hace, sino el sentimiento de miedo y frustración ante una vida que no ha sido fácil.

Dos personajes tan de verdad, tan humanos con los que consigues conectar pasados unos minutos del comienzo. Sí que es cierto, que a mí me resultó más fácil conectar con uno de ellos desde el minuto cero, pero la forma en que el guion nos va presentando todo lo que va sucediendo, consigue crear una simbiosis en ambos, en la que lo que le falta a uno, el otro le complementa y viceversa. Los actores convencen, siendo Sion Daniel un virtuoso cantante, ofreciendo algunos números musicales inolvidables (como el del segundo episodio). Pero no te confundas, no es una serie musical, simplemente, el personaje de Gabriel tiene una dilatada carrera como drag en uno de los clubs más famosos de la zona, de ahí el intercalado de algún tema que él mismo canta. Brutal.

Que he llorado, no lo dudes ni por un segundo. La escena del folleto me ha perforado el corazón y a partir de ahí, ha sido un no parar. Por todo el desarrollo de la historia. Por la química de todos sus personajes, por los giros de la trama, por una realidad dura y cruel.

También quiero que sepas que no por ser temática del colectivo te voy a recomendar todo lo que pase por mis pupilas, puesto que también veo historias que no me convencen para nada. Sigo fiel a mis principios desde que abrí esta web y todo lo que no me guste, nunca lo sabrás…

Si quieres un paseo inolvidable por todos los colores del arco iris, ni te lo pienses, porque no te arrepentirás. Y yo seguiré buscando maravillas como esta. Así que por todo lo dicho, no creo que tenga que decirte que corras a ver esta preciosa historia, dura pero muy realista.

¡Nos vemos la semana que viene!

UNDERWATER (o un Lovecraft en el abismo marítimo)

Underwater (2020)


Dirección: William Eubank

Reparto: Kristen Stewart, Jessica Henwick, T.J. Miller,  Vincent Cassel, John Gallagher Jr., Gunner Wright, Mamoudou Athie

SINOPSIS

En el año 2050, la estación de investigación y perforación submarina Kepler 822 sufre la sacudida de un terremoto subterráneo en la Fosa de Las Marianas, dejando parte de la estación dañada e inservible. Los pocos tripulantes que sobreviven, comienzan una carrera contra reloj para tratar de escapar de las instalaciones antes de que se inunden por completo. Pero con lo que no cuentan es con que en el exterior, algo les está observando y esperando.

OPINIÓN PERSONAL DE «UNDERWATER»

Aquí estamos de nuevo, yo para contarte mis impresiones acerca de una película y tú para leerla y darme tu opinión al respecto. ¡Me encanta!

Hoy he decidido hablarte de una película que quizás te suene, pero que tampoco tuvo excesiva fama. Quizás por estrenarse muy poco antes de la pandemia, quizás por el destrozo de la crítica experimentada, o también por las exigencias de un público que ya no sabe ni lo que quiere. Y te comento esto porque siempre me gusta leer las críticas de los espectadores reales más que las de los críticos especializados. Siempre me sorprende el espectador medio. Antes de darte mi opinión te explico un poco el porqué de mi reflexión.

Si una película de acción profundiza demasiado en la psique de sus personajes, se la tilda de aburrida y de “no ir al grano”. Pero si se esbozan ligeramente en beneficio de la historia se la machaca por tener personajes “sin alma”.

Si una película tiene un monstruo no real, es igual que Alien, si es real, como Tiburón. Si ocurre en el agua es copia de la del espacio pero bajo el agua. Y así hasta el infinito.

Si es una comedia, es burda, o sosa, o no hace gracia, o es excesiva. No sé, entiendo que no llueva a gusto de todos, pero al final no deja de ser un trabajo que (a excepción de ciertos serie z) suele hacerse con dedicación y ganas de agradar al público. Y por eso me gusta esta película, porque a mí me ha hecho pasar un mal rato.

Comenzamos con mi aversión al fondo del mar (o al mar en general donde no hago pie) del que ya sabes algo por mis reseñas de “Tiburón” o “Tiburón 2”. Y aunque esta historia no es tan realista por el hecho de encontrarse a once mil metros y ser atacados por unos seres desconocidos, la angustia del fondo del mar sigue latente en mi interior.

“Underwater” nos ofrece poco más de hora y media de adrenalina en estado puro, en una instalación sumergida a más de diez mil pies y una lucha desesperada por sobrevivir tanto dentro como en la oscuridad abisal. Y además, por si esto fuera poco, algo les acecha en el fondo marino. Y personalmente, no me gusta buscar referencias cuando la historia me atrapa. Unos efectos especiales muy buenos, gracias a que el hecho de ser bajo el mar, en la oscuridad y la neblina que proporcionan las linternas, el cgi no desentona en absoluto. Quizá alguna escena es demasiado oscura, pero también lo era en “Alien” y no por ello deja de ser una buena película. 

Los protagonistas no están excesivamente delineados, por lo que conocemos más bien poco de cada uno de ellos. Resulta complicado empatizar con ellos, puesto que la acción comienza a los escasos cinco minutos de película, lo cual yo agradezco. Durante el metraje, vemos pequeñas pinceladas de la personalidad de todos ellos y yo, que ya sabes cómo me meto en las historias, me siento lo suficientemente informado como para que sienta pena por los supervivientes.

Kristen Stewart no es una de mis actrices favoritas, por eso el hecho de que me guste esta historia no se basa en absoluto en mi devoción por la actriz protagonista. Creo que realiza un buen trabajo, alejado en exceso de su meloso papel en la saga “Crepúsculo”, lo cual demuestra que posee otros registros y que es capaz de  llevar el peso de una historia tan claustrofóbica como esta. Vincent Cassel resulta acertado en su papel de jefe de los supervivientes y el resto compaginan un entorno coral con diferentes estados de ánimo ante una situación que se les ha ido de las manos.

El final de la película es brutal, al menos para mí. Desolador y abrumador, como los que a mí me gustan. Muy al estilo de “La niebla”, de esos que te dejan una sensación agridulce en la boca. Sabiendo que quizá podría haber existido otro final, pero tampoco sabes si eres capaz de encontrarlo.

¿Conocías esta película? ¿Te gustan las películas de monstruos marinos?

¡Nos vemos la semana que viene!


VUELO NOCTURNO (o volar de noche no es tan acogedor)

Vuelo nocturno (2005)


Dirección: Wes Craven

Reparto: Rachel MacAdams, Cillian Murphy, Brian Cox, Laura Johnson, Max Kasch, Jayma Mays, Suzie Plakson, Angela Paton, Jack Scalia

SINOPSIS

Lisa Reisert es la gerente de un hotel de lujo de Miami, que está a punto de volver de Dallas en un vuelo nocturno tras el funeral de su abuela. Antes de subir al avión que lleva bastante tiempo de retraso, conoce a Jackson Rippner, que resulta ser su compañero de asiento en el vuelo. Pero no es una casualidad. Jackson tiene un plan para el que necesita la colaboración de Lisa, y para ello no dudará en poner en peligro al padre de la chica. Comienza una noche de horror a miles de pies de altura.

OPINIÓN PERSONAL DE «VUELO NOCTURNO»

Hoy nos vamos de thriller de mediados de los dos mil del maestro del terror Wes Craven. Y aunque ya te hablé de “Pesadilla en Elm Street” hace un tiempo, que es la especialidad de este director, me apetecía hablarte de un thriller bastante interesante y que se sale un poco del estilo de Craven.

Una historia que te mantiene en vilo durante toda la parte del metraje que ocurre dentro del avión, por el simple hecho de que no hay escapatoria alguna para la protagonista. Este director no abusa de la música frenética, los ruidos impactantes o los movimientos rápidos de cámara. Porque aquí no hace falta. El suspense se crea en los silencios, en las miradas de socorro que nadie parece ver, en las amenazas del villano.

Las actuaciones de Rachel MacAdams y Cillian Murphy son espectaculares. Ella, conocida por la maravillosa “El diario de Noa” y la divertida comedia “Chicas malas”, ambas del año anterior, nos ofrece una interpretación vibrante y llena de matices, en los que el miedo que le ha acompañado toda su vida, se vuelve real en una carrera contrarreloj en la que hacer lo correcto para el bien común o pensar en uno mismo toma una fuerza arrolladora. Tengo que decir que el actor Cillian Murphy no es santo de mi devoción, más que nada porque me resulta un actor bastante desagradable (por su gestualidad, imagino), así que este papel le viene que ni pintado. Frío, calculador y con unos ojos azules que transmiten un mal rollo impresionante.

Tenemos que tener en claro, que hay que ver esta película sin hacerse para mí la pregunta más importante de todas: ¿es que nadie les escucha hablar en el silencio del avión? Si obviamos esa cuestión, porque lo lógico sería susurrar durante toda la película, pero eso la haría bastante ridícula, la historia está muy bien tejida. La forma en la que los dos protagonistas se conocen, cómo el plan va metódicamente estudiado, y la forma en la que Lisa trata de no ser partícipe, me resultan muy interesantes.

Quizá no tenga mucha diferencia con cualquier thriller de fin de semana de televisión digital, puede que sea cierto, pero la forma de filmar de este director a mí me cautiva. Un espacio reducido, un avión de pasajeros y la angustia de no poder escapar de allí. Alguien sentado a tu lado obligándote a hacer algo que puede cambiar el rumbo de la historia. ¿Lo harías? A mí me resultó una historia bastante asfixiante. Es entretenida. Quizá no muy realista, pero eso es el cine ¿no?

El final es un Wes Craven de manual, jugando con la tensión por última vez fuera del avión y a mí consiguió ponerme bastante nervioso. ¿Que hay clichés? Puede. Pero al fin y al cabo, el cine se nutre una y otra vez de lo que conoce y juega con ello en su propia partida.

No fue una película demasiado contundente en su época, en parte imagino porque los amantes del cine de Craven esperaban ver un nuevo “Scream” y se encontraron con un thriller inquietante pero para nada terrorífico. Un punto a su favor es el tráiler de la época, que no revela absolutamente nada de la trama. No como hoy en día, que podemos deducir el 90% de las historias en sus trailers.

Así que te recomiendo este thriller en las alturas para pasar un buen rato lleno de intriga y tensión, que si bien no es de lo mejor de su director, sí que consigue una historia bien organizada, clara, concisa y directa a su objetivo.


[REC] 3 : GÉNESIS (o el día más feliz de tu vida)

[REC] 3 : Génesis (2012)


Dirección: Paco Plaza

Reparto: Leticia Dolera, Diego Martín, Alex Monner, Jana Soler, Mireia Ros, Ismael Martínez, Itziar Castro, Ana Isabel Velásquez, Emilio Mencheta

SINOPSIS

Koldo y Clara están celebrando el día más feliz de sus vidas. Por fin se han dado el sí quiero y van a celebrar con toda su familia y amigos un maravilloso convite en una finca junto a la iglesia. Un tío de Koldo, veterinario, llega con una pequeña herida en su muñeca hecha por un perro que parecía muerto. En medio de la fiesta, entre bailes y risas, el caos explota cuando varios infectados, incluido el tío de Koldo comienzan a atacar al matrimonio y a todos los invitados.

OPINIÓN PERSONAL DE «REC 3 : GÉNESIS»

Feliz domingo y feliz llegada de la Navidad. Ya queda menos y mi época estival favorita comienza en breve, por lo que estaré desconectado de mis artículos, como cada diciembre.

Pero como todavía no es hora, hoy te traigo una película que me gusta bastante y para ser una tercera parte, tiene su mérito. El dúo Jaume Balagueró y Paco Plaza nos trajeron allá por el 2007 una infección en un edificio español al más puro estilo americano, demostrando que en tierra patria también somos capaces de crear el caos zombi. Repitieron en 2009 con la secuela y en el 2012, uno de ellos, Paco Plaza, se arriesgó con una tercera parte, cambiando de escenario y de protagonistas. Jaume haría lo mismo en solitario con la cuarta entrega en 2014.

Nuevo escenario, nuevos personajes, pero las mismas reglas. De hecho, esta película se ubica entre las dos primeras, pero sirve como precuela, ¿o no? El caso es que uno de los invitados, tiene relación con un suceso de la primera parte, por lo que podemos hilar por ahí de donde sucede todo en la boda.

Si ya conoces la historia de sus dos partes anteriores, ya conoces la velocidad a la que el virus se propaga por el cuerpo del infectado. En esta ocasión, la velocidad es la misma, por lo que no existe tiempo al respiro en el momento en que alguno de los protagonistas resulta infectado. Yo trato de meterme lo más posible en las historias para poder disfrutarlas completamente, creo que ya lo sabes. Y con ésta, me ocurrió algo especial; la situación, a priori, es más de lo mismo, pero al cambiar el escenario y la situación, me resultó mucho más cruda. ¿Y en qué sentido?

Estamos en la boda de Koldo y Clara. Sus familiares, sus mejores amigos. La gente a la que quieren. Y de pronto, todo eso desaparece y ven cómo su entorno se va transformando en seres sedientos de sangre, asesinos implacables, especímenes repugnantes. Pensaba en la situación real (obvio que hay que echarle imaginación) de que algo así te ocurriera a ti. Toda la gente que forma parte de tu mundo, estarían infectados y tratando de matarte. Es una película, ya lo sabemos, pero no por ello deja de ser grotesco que sea toda tu familia y amigos, encerrados en aquella finca. No sé, a mí me pareció en ese aspecto mucho más dura que las dos primeras.

El trabajo de maquillaje y vestuario resulta muy bien ejecutado, al igual que en sus antecesoras, pero en esta parte, la visión de la putrefacción que el virus crea en los infectados mezclada con los trajes típicos de una boda, le ofrece un toque bastante más exagerado a la situación.

Los actores que cargan con prácticamente todo el peso de la cinta son Leticia Dolera y Diego Martín y cumplen satisfactoriamente. El amor que se profesan (digno de buen adoctrinamiento religioso) supera todas las expectativas y llega a límites insospechados. Y eso me hace preguntarme ¿harías lo mismo, o tratarías de salvarte tú? Ahí lo dejo. Ambos ofrecen a dos personajes realistas (él quizás un poco más que ella) pero consiguen que el espectador empatice con ambos, puesto que no nos encontramos con un Bruce Willis o una Tomb Raider capaces de hacer lo imposible por ofrecer un buen espectáculo. Son dos personas normales y corrientes que tratan de escapar de una situación que no pueden dominar. Y creo que ahí radica su esencia de película realista (dentro de, entiéndeme) y por lo tanto mucho más disfrutable y sufrible, que también tiene lo suyo.

En cuanto al terror en sí mismo, no supera a sus predecesoras, eso es cierto. Consigue crear un ambiente de angustia, de pánico, pero los sustos y sorpresas de Rec 1 y 2 no los superan. Pero no por ello es menos digerible. Ya sabemos a lo que vamos y estamos preparados. Y de ahí a pasarlo bien con el corazón en un puño.

El final. No hago spoilers, ya lo sabes. Pero vaya final de traca. ¿Qué me molestó? Me dio rabia, pero al final, yo poco puedo hablar dedicándome a la escritura de novela negra y siendo tan despiadado como soy con mis personajes. Pero lo cortés no quita lo valiente y aunque me gustó bastante, su pellizquito en el corazón, ahí está.

Así que si no conocías esta tercera parte, muy altamente recomendable por su violencia y sangre a raudales, recomendada queda por este servidor. ¡Que pases una entrada de la Navidad estupenda!

¡Hasta la próxima!


MAN IN AN ORANGE SHIRT

Man in an orange shirt (2017)


Creación: Michael Samuels

Reparto: Julian Morris, Vanessa Redgrave, Oliver Jackson-Cohen, David Gyasi, Eddie Arnold, Ben Barker, Joanna Vanderham, Charlie Wernham, Julian Sands

Temporadas: 1

Episodios: 2

SINOPSIS

Miniserie que relata dos historias de amor entrelazadas que ocurren tras el final de la Segunda Guerra Mundial en los años 40 y en plena era tecnológica en 2017. Ambas historias están entrelazadas por el personaje de Flora, esposa de Michael y abuela de Adam, los dos protagonistas de las historias.

OPINIÓN PERSONAL DE «MAN IN AN ORANGE SHIRT»

Seguiré recomendándote este tipo de historias, ya que creo fervientemente que son muy necesarias a día de hoy. Todo el recorrido, todo el dolor y sufrimiento de tantos y tantos, no debe ser olvidado, ni dado por hecho. Como dijo alguien, quien olvida su pasado está condenado a repetirlo. Y por desgracia, esa apatía ante lo luchado de muchos, puede volverse en nuestra contra y regresar a esos momentos. E incluso peores.

Si hace unas semanas te hablaba de “Fellow Travelers” y la era McCarthy en EEUU, hoy viajamos a la Segunda Guerra Mundial y lo entremezclamos con la era más actual (2017), pero en el Reino Unido. Como en la serie antes mencionada, la historia que se desarrolla en los años 40 entre los dos veteranos Michael y Thomas, el miedo a la cárcel por dar a conocer sus preferencias sexuales, hace que estos dos enamorados tomen caminos muy diferentes, marcando así sus vidas y las de los que les rodean. Y en la parte en la que nos encontramos en el año 2017, el miedo al compromiso y el hábito (buena palabra de uno de los protagonistas, que refleja esa realidad) ante ese tipo de relaciones esporádicas, hace que cada uno de ellos se replantee su realidad y su futuro.

Julian Morris, como el joven Adam, ofrece una interpretación que refleja a la perfección la situación actual de muchos jóvenes homosexuales. La era tecnológica, donde las aplicaciones de citas y sexo rápido han cobrado una importancia excesiva, nos muestra a un joven que no es capaz de establecer una conexión real más allá del sexo. Su situación, todavía en el armario ante su abuela con la que vive, hace que se escape a escondidas a sus encuentros, y desaparezca nada más terminar. La aparición de Steve pondrá patas arriba su mundo y su percepción del sexo y las relaciones. Julian convence con cada fotograma, con esa mirada penetrante a la que nos tiene acostumbrados. Del mismo modo, el sublime Oliver Jackson-Cohen hace su parte como veterano de guerra con una convicción excelente. Cada mirada, cada lágrima, nos muestra el dolor, el miedo y la resignación de una persona que no quiere ser juzgada por la sociedad. El conflicto emocional que carga durante toda su vida, la melancolía del quiero y no puedo. Brutal.

Vanessa Redgrave ofrece una más de sus espectaculares actuaciones, poniendo en perspectiva cómo el dolor por lo vivido es capaz de dejarnos un poso tan profundo que salpique a quien no debe. La dualidad con la que lucha durante la historia (primero con su marido y luego con su nieto), nos hace ver lo difícil que es no posicionarse y ser ecuánime. Y justo. Y no comparar. Por supuesto, tanto la actriz que interpreta a Flora de joven como Vanessa, lo bordan.

Como siempre, la BBC ofrece un gran producto de una calidad inmejorable. Interpretaciones creíbles, un guion sublime, en el que se ofrecen los matices tan diferentes y a la vez tan cercanos entre ambas historias. Una fotografía espectacular, donde cada fotograma nos revela el dolor y la angustia de los personajes, y no solo de los protagonistas principales. La ambientación de ambas épocas, la música es emocionalmente intensa y el final no desmerece a una bella historia perfectamente filmada.

Así que de las islas británicas, te recuerdo la maravillosa «It´s a sin«, ambientada en los ochenta y hoy esta maravilla antes y después de la anterior. Los años 40 y 2017. Pero el mensaje es el mismo en todos los casos. No olvidemos la lucha, lo sufrido y lo perdido de nuestros antepasados, de todos los que nos precedieron. Porque les debemos lo que podemos ser hoy. Que aunque no es lo que quisiéramos, es mucho más de lo que ellos tuvieron. También te vendría bien echarle un ojo a «Las noches de Tefía«, que en España también tuvimos lo nuestro.

Por ponerle un pero, quizás en vez de ofrecernos una miniserie de dos episodios, se podría haber ampliado a un par de ellos más, para ofrecer dos episodios por historia, y conocer un poco más a estos bellos personajes. Pero aun así, es una serie que dura menos que una película de Marvel por ejemplo, por lo que puedes visionarla en un rato.

Y así sin más, llegamos al final de la reseña, que espero te haya picado el gusanillo para conocer estas dos historias de amor. No te arrepentirás. ¡Hasta la semana que viene!

EL PALO (o las bandidas del barrio)

El palo (2001)


Dirección: Eva Lesmes

Reparto: Carmen Maura, Maribel Verdú, Adriana Ozores, Malena Alterio, Juan Gea, Jaime Pujol, Joaquin Climent

SINOPSIS

Lola, una ama de casa separada y con un niño, decide atracar el banco en el que trabaja como limpiadora. A ella se une su mejor amiga, una peluquera embarazada que mantiene una relación con su jefe, un hombre casado. La mujer para la que trabaja Lola, acaba de descubrir que su marido la dejó llena de deudas y también se une al grupo. Para terminar, una joven carterista que no tiene a donde ir, decide ayudarlas. Entre las cuatro se preparan para dar el palo perfecto al banco. O no.

OPINIÓN PERSONAL DE «EL PALO»

Me alegra mucho verte de nuevo por aquí y hoy nos vamos a principios de los dos mil para traerte una de las comedias españolas que más me gustan. La visioné de nuevo hace unos días y a pesar del tipo de filmación, que obviamente ha ido mejorando con el paso de los años, no ha perdido frescura alguna en cuanto a la historia y al mensaje que nos quiere ofrecer.

La directora se estrenó en 1996 con otra comedia “Pon un hombre en tu vida”, la cual también me gusta bastante y que nos muestra un cambio de identidades entre una cantante de orquesta de hotel y un entrenador de fútbol. Un “Ponte en mi lugar”, “De tal astilla, tal palo”, “17 otra vez”, “El cambiazo”, “Este cuerpo no es el mío” o la horrible y desafortunada “Familia revuelta” (de un mal gusto increíble). La historia trillada a más no poder pero a la española, lo cual a mí me resultó bastante divertido.

Si ya sabes mis gustos, el humor zafio y grosero (Torrente, mejor ejemplo no lo hay) es algo que me produce un gran rechazo. De ahí que este tipo de comedias como de la que te hablo hoy me gusten tanto. No vas a reírte sin parar, ni a soltar grandes carcajadas. Pero lo que está claro es que vas a pasar un buen rato con situaciones alocadas, irreverentes y casi imposibles para cuatro mujeres a la desesperada. Con un ritmo justo, centrado y directo. Sin abusar de los gags, cosa de la que carecen la mayoría de comedias al uso (Torrente again), consigue sacar muchas sonrisas a lo largo de su escasa hora y media. Porque lo importante en una comedia no consiste en crear unos personajes que recorren la historia a base de estupideces buscando la risa fácil. Y esto me recuerda a “¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?”, de la que te hablé hace tiempo y que caminaba por el mismo estilo de comedia. Sutil, clara y lógica.

Una madre de clase obrera (Adriana Ozores) typical spanish. Una mujer de clase alta (Carmen Maura) que cae de su pedestal al descubrirse en bancarrota. Una peluquera sexy (Maribel Verdú) que sigue creyendo en el amor verdadero. Una macarra marginal (Malena Alterio) huérfana y perdida en la vida. Cuatro personalidades totalmente opuestas entre sí, pero unidas por un objetivo común: robar el banco en el que trabaja una de ellas para salir del pozo en el que se encuentran.

Realmente, aunque la historia es cruda en cuanto al trasfondo social (machismo, apariencias, desapego, soledad, falsas promesas) de todas las protagonistas, no hace que merme el objetivo de la directora, que es sacar una sonrisa dentro de las desgracias personales de las mujeres. Por lo tanto, no ahonda demasiado en los problemas, sino que simplemente los coloca sobre la mesa, para que el espectador entienda la motivación de cada una de ellas para cometer el delito. Y lo hace de tal manera, que consigues empatizar con su objetivo (¿a quién no le da rabia el abuso de los bancos?) y desear que lo consigan para mejorar sus vidas y poder salir adelante.

Así que para terminar, te recomiendo echarle un vistazo, ya que estamos ante una comedia ligera perfectamente estructurada y guionizada. Con cuatro personajes protagonistas excelentemente interpretados por cuatro fieras de la escena, incluyendo a una desconocida (por aquel entonces) Malena Alterio que se ganó una nominación a los Premios Goya como actriz revelación por este papel. Momentos inolvidables como el viaje al mercadillo o la preparación del plan, vuelven a hacerme sonreír al recordarlos. Y eso significa que el trabajo en equipo está bien hecho.

¿Te gusta el cine español? ¿Qué opinas de las comedias?

¡Hasta pronto!