Riverdale (2017)
Creación: Roberto Aguirre-Sacasa
Reparto: KJ Apa, Lili Reinhart, Camila Mendes, Cole Sprouse, Madelaine Petsch, Ashleigh Murray, Casey Cott, Charles Melton, vanessa Morgan, Mädchen Amick, Luke Perry, Marisol Nichols, Mark Consuelos, Skeet Ulrich.
Temporadas: 7
Episodios: 137
SINOPSIS
En la pequeña ciudad de Riverdale, los famosos personajes del comic Archie de los años cuarenta, viven en la actualidad. Los devenires diarios del grupo de amigos se entremezclan con misterios, amores, desencuentros, secretos y asesinatos. La mañana del cuatro de julio, Jason Blossom desaparece en el rio Sweetwater y la única testigo es su hermana Cheryl. Cuando el curso escolar da comienzo, la ciudad todavía está en shock ante la falta de pruebas sobre el paradero del joven Blossom. Hasta que su cuerpo aparece en el río. Todos los habitantes de Riverdale podrían ser sospechosos. Los que saben algo y los que ocultan algo.
OPINIÓN PERSONAL DE «RIVERDALE»
¡Buenas de nuevo! Hoy te doy la bienvenida a Riverdale, una pequeña ciudad con demasiados secretos. Que bien podría llamarse Danford, porque todas mis historias se nutren de series como de la que te voy a hablar hoy. Una serie coral en la que todos los personajes tienen su peso en la historia en mayor o menor medida para que la trama avance. Una tela de araña que les va encerrando cada vez más hasta llegar al clímax de cada una de las siete temporadas que componen la serie. Muy al estilo de «Pequeñas mentirosas», donde un misterio y la forma en la que se va desentrañando, se mezcla con los dramas personales de los protagonistas.
He esperado a que Netflix nos trajera la última temporada para poder ver la serie de un tirón, ya que hace mucho que vi la primera temporada y me gustó mucho. Pero he preferido esperar a que llegara a su fin, para devorarla tranquilamente, sin los nervios de esperar a una nueva temporada.
Aunque los personajes están basados en los cómics de Archie, la historia y los habitantes de Riverdale son mucho más oscuros que en los cómics, porque bueno, al final son comics de hace casi ochenta años, y los tiempos han cambiado bastante. Además, crearle una oscuridad a la historia la hace mucho más llamativa para los espectadores. Para mí, han dado en el clavo.
Hay algo que me ha sorprendido mucho en cuanto a la creación de personajes y que nunca me había pasado. Que un personaje (de los buenos, por decirlo así) me cree rechazo desde el minuto uno, es algo que Josie McCoy ha conseguido. Es lógico que un personaje de los malos, por decirlo de alguna manera, te cree antipatía, porque es su cometido, el no empatizar con la mayoría de espectadores. Para eso están creados, son la antítesis del héroe. Pero es que el personaje de Josie me resultó desagradable desde que apareció en pantalla. Duró solo tres temporadas (lo cual agradezco), pero es que apareció como invitada en temporadas siguientes y me produjo el mismo rechazo. No sé si se debe al personaje, a la actriz, al guion que interpreta o a un conjunto general de todo ello. Pero no me gustó nada de principio a fin. Los demás puede decirse a rasgos generales que sí. Mención especial a Mädchen Amick a la que no veía desde Twin Peaks y que encima ha sido directora de un montón de episodios de la serie. Y por supuesto al tristemente fallecido Luke Perry, como el padre de Archie, al que le otorgan un episodio especial tras su muerte, que me pareció un gesto precioso.
La dirección y la fotografía son muy del estilo que a mí me gustan. La iluminación a medio gas, los colores vivos (el rojo de Cheryl es maravilla pura), la chaqueta amarilla y azul de Archie… La estética mezcla de los años sesenta con la actualidad me ha conquistado. Creo que parte del encanto de esta serie tiene mucho que ver la estética de los personajes, ya que en los comics están muy bien delineados para poder diferenciarlos. Y así se hace en la serie. El vestuario aporta un punto clave para definir a cada uno de ellos y eso se agradece.
La banda sonora de Blake Neely creo que es brutal. Las melodías suaves, con guitarras acústicas, violines, son fuera de serie. Busqué en YouTube, y por ahí andan las temporadas completas del score de Neely y madre mía. Compactan a la perfección con las imágenes, con cada momento de tensión, de drama, de amor. Un diez en este aspecto, así como los capítulos musicales de cada temporada. Con la excusa del musical anual del instituto, los personajes nos ofrecen sus dotes como cantantes (no todos son maravillosos, pero cuadran bastante bien) mientras esas canciones van hilando la continuación real de la serie. Es decir, las letras van acordes al desarrollo de la trama principal de la temporada, lo cual le ofrece un punto extra de interés. Y a mí que me gusta un «Glee» más que el comer, pues los he disfrutado bastante. Carrie, Hedwig, Next to normal (alucinante este episodio musical), Heathers y American Psycho. Mientras que en la quinta es una historia en torno a las Pussycat y en la siete en torno a Archie.
Las temporadas han sido una locura. Nunca había visto una serie con giros tan locos. Mientras que las cuatro primeras temporadas son correlativas entre sí, la quinta da un salto temporal, la sexta se vuelve ficción absoluta y la séptima es un plow twist brutal. Obviamente no te voy a desvelar nada, pero a mí me resultó un cambio fresco en cuanto al tono de la serie, puesto que como ya te he comentado antes sobre «Pequeñas mentirosas», rizar mucho el rizo hace que desistas de seguir con la misma intensidad, aunque a mí me gustara mucho esta serie. Seguir creando tramas es algo que termina por agotar la paciencia de los espectadores, y debes ofrecer algo diferente. Y en Riverdale eso ocurre. Vaya si ocurre… Pero también te digo, que hay que estar abierto mentalmente a lo que puede suceder, para no llevarte sorpresas desagradables. Yo lo he hecho con cada giro y me ha encantado.
Y vamos con el último episodio, que ya sabes que es algo de lo que me gusta hablar. Más que nada, porque odio los finales abiertos cuando una serie llega a su fin. Riverdale… ¡ay Riverdale! Tras siete temporadas, estoy en posición de afirmar que es uno de los mejores finales de serie que he visto en mucho tiempo. Y aclaro, no tengo en cuenta las miniseries que tienen principio y fin. Me baso en series de gran formato de varias temporadas y que sus capítulos pasan de medio centenar (e incluso más de un centenar). Aunque sabes que soy de lágrima fácil, estuve con la llorera desde el minuto uno, hasta el final. Literalmente, como lo oyes. No pude dejar de estremecerme a cada minuto que pasaba. Para mí, matrícula de honor ante un final que deja un buen sabor de boca. Triste por ser el fin, pero un cierre soberbio.
Y hasta aquí esta reseña, que espero te haya hecho pensar en darle una oportunidad a esta ciudad llena de secretos. Y repito, como Danford…
¡Nos vemos muy pronto!




