MUSEO DE BELENES

Museo de Belenes y escenas de la época


Ubicación: Mollina, Málaga

QUÉ PUEDES VER:

En este museo situado en el pueblo de Mollina, en el interior de la comarca malagueña, se encuentra este maravilloso museo de belenes. Alrededor de setenta representaciones de diferentes artistas, dispuestos en siete salas. Con más de dos mil figuras, cada diorama tiene su propia personalidad y cuenta diferentes momentos de la época navideña cristiana.

OPINIÓN DE «MUSEO DE BELENES”:

Como se está acercando la Navidad y a mí esta época me encanta, no quería dejar de recomendarte este museo que se encuentra en Mollina, cerca de la capital malagueña y que es un espectáculo en su totalidad. Realmente poco importa si te gusta la Navidad, si crees en Jesús o si no eres cristiano. La labor de todos los artistas que han trabajado en la creación de todos los dioramas (casi setenta, que se dice pronto), es de un cuidado y mimo asombroso. Dando importancia a cada detalle, a cada escena, a cada esquina que puedas buscar en cada uno de los dioramas. Un trabajo elaborado que te hace descubrir una parte de nuestra historia (creas o no en Dios), acerca de cómo vivían, dónde vivían y cómo era su día a día.

¿Lo bueno de este museo? Que está abierto todo el año. Sí, es cierto que cuando se acerca la época de Navidad, el espíritu nos invade y lo disfrutamos muchísimo más. Pero debes saber que no serás la única persona a la que invada ese espíritu. Por lo que la afluencia de gente es mucho más abundante en época navideña que el resto del año (que es algo obvio). Pero gracias a a estar abierto todo el año, puedes disfrutarlo cuando quieras.

En la zona exterior podemos descubrir algunas piezas de artes y costumbres de la época, así como una típica casa andaluza de antaño. También decirte que si vas con niños, hay una zona de juegos infantiles para que pasen un buen rato mientras tú analizas todo lo que has visto dentro. También tienes una zona de restauración para tomar algo de beber, almorzar o merendar, así como una tienda con productos típicos de la zona.

Punto importante y a favor de este museo es la accesibilidad. Rampas y ascensores para sillas de rueda dan fe de la importancia que este museo da al libre acceso de todos sus visitantes. Por otro lado, también tiene zona habilitada para eventos, tanto exterior como interior. Está claro que en un entorno tan natural como es este museo, han pensado en todas las opciones para que los visitantes disfruten al máximo de la experiencia.

Tienen página web con toda la información necesaria sobre tarifas, horarios y forma de llegar hasta allí. Mollina está a unos 60 kms de la capital y si piensas echar el día de ruta, a unos 40 kms puedes visitar los dólmenes de Antequera, que son majestuosos. Así tienes el día completito, porque ventas y restaurantes para comer típica comida andaluza no te van a faltar.

Así que ahora que se acerca la época navideña, escápate un día a visitar esta preciosidad. Seguro que no te arrepentirás. ¡Feliz Navidad!


ALGUNAS IMÁGENES…


CAM (o hackeada hasta el extremo)

Cam (2018)


Dirección: Daniel Goldhaber

Reparto: Madeline Brewer, Samantha Robinson, Patch Darragh, Melora Walters, Devin Druid, Imani Hakim, Michael Dempsey, Flora Diaz, Jessica Parker Kennedy

SINOPSIS

Alice trabaja desde casa como cam girl de forma anónima, consiguiendo separar su vida privada de su vida laboral. Pero un día descubre que alguien ha hackeado su cuenta para conseguir su posición entre las mejores cam girls. Y lo más preocupante de todo, quien lo ha hecho es una réplica exacta de ella misma.

OPINIÓN PERSONAL DE «CAM»

Aquí estoy de nuevo para hablarte de una película del 2018 y que a título informativo, si no fue la primera, fue la segunda película que vi en la plataforma Netflix. Por la misma época que «La perfección», de la que te hablé hace un tiempo. La razón, por supuesto fue el tráiler. Me encantan los trailers. Aunque con el paso del tiempo, me he dado cuenta que ese afán por conseguir espectadores, ha hecho que las productoras destripen casi todas las películas ya desde esa publicidad. Y Netflix no se queda atrás, porque de hecho creo que es quien más destroza sus estrenos con los trailers.

La historia me pareció interesante ya desde su sinopsis. El hecho de no poder acceder a tu cuenta (ya seas una cam girl o simplemente tu instagram) es algo que a todos nos puede pasar. Está a la orden del día, y la protagonista lo sufre en sus propias carnes. Y a niveles totalmente insospechados, sobre todo económicos. La suplantación de identidad es algo que ocurre y seguirá ocurriendo porque todo lo que se esconde en la red, es algo que a la gran mayoría se nos escapa. Pues aquí la protagonista pierde su fuente de sustento y debe hacer frente a algo que no entiende. Alguien ha suplantado su identidad frente a una cámara en vivo… A mí me resultó curioso. Ya en “La red” de Sandra Bullock, allá por el 95, observábamos la impotencia de una Angela Bennett a la que le habían robado su vida y se convertía en una delincuente gracias a los tejemanejes de una empresa poderosa. En aquella película, eran datos, informaciones. En esta, Alice hace frente a alguien que se cuela en sus shows en vivo, igual que ella y comienza a beneficiarse de todo lo que Alice ha conseguido con esfuerzo. Imagino que eso me incitó a verla. Obviamente, a mí las cam girls pues como que no, por lo que el visionado de esta película nada tiene que ver con el morbo de poder ver algo más subido de tono (que por cierto no lo hay, nada más allá de escenas que insinúan pero no muestran, lo cual le ofrece un tono de película seria).

La actriz protagonista. Madeline Brewer (El cuento de la criada), es la que lleva todo el peso de la cinta, puesto que sus compañeros de reparto, básicamente la acompañan para que ella pueda expresar en ciertos momentos de la película sus inquietudes, sus miedos y la situación que está viviendo durante la película. Por lo que el resto de los personajes, aparecen delineados de forma excesivamente básica. Ello refuerza el trabajo unipersonal que hace la actriz durante casi el 99% del metraje. Aunque “El cuento de la criada” se estrenó un año antes de esta película, yo vi antes “Cam”. Así que cuando empecé a ver la serie de Gilead y apareció Madeline en escena, fue una grata sorpresa (algún día analizaré esta serie, que tiene también mucha miga). Alice es un personaje con muchas aristas, y Madeline consigue que empatices con ella casi desde el minuto uno. Y mucho más intensamente cuando todo empieza a torcerse.

La estética resulta muy kitsch, con esos colores centelleantes tanto en el mobiliario como en la habitación de Alice. Al fin y al cabo, ofrece una visión muy realista de como suelen ser los escenarios que se utilizan en este tipo de páginas web. Además, esa estética tan excesiva refuerza las tomas que se realizan en el resto de su apartamento, en casa de su madre o en otros espacios. Consigue mostrar un mundo imaginario, falso, creado única y exclusivamente para deleite de clientes ávidos de excitación. Una mentira con alfombras de pelo, purpurina y plumas de colores. Todo un escenario que trata de ser real para quien lo mira.

La historia me pareció interesante. Realista, por supuesto que no. Tampoco creo que haber buscado un final realista hubiera tenido mucho sentido. El robo de identidad tampoco es un recurso novedoso, por lo que lanzarse a alguna red de falsificadores o tramas gubernamentales ocultas habría sido repetir una vez más. Por lo que el giro que nos ofrece esta historia me pareció algo diferente. ¿Que no aclara en su totalidad su cometido? Puede que no. O quizás sí. En cada uno de nosotros está el buscar el mensaje cuando los títulos de crédito aparezcan…

Como detalle nimio, pero en lo que me gusta mucho fijarme, es en las fuentes que se utilizan en los títulos, trailers, etc… Me encanta la tipografía que utilizan en este filme, porque resulta muy ochentero, recordándome a antaño… Y aunque lo utilizan tanto en el tráiler como en la película, en el cartel que he encontrado, la tipografía es muy básica, perdiendo para mí parte de ese encanto. Pero bueno, detallito sin importancia…

Para terminar, me pareció una premisa interesante, que no decae en ningún momento. La actuación de Madeline Brewer es muy aceptable y está muy bien filmada. Una forma de conocer los entresijos de las cam girls sin tener que navegar por la red ni gastarse ni un solo «token».

¿Conocías esta película? ¿Te gustó? No olvides dejar tus comentarios más abajo.

¡Hasta la próxima!


TODOS MIS VÍDEOS

Videobook
Todavía tengo tiempo (2022)
Arte (2021)
La Fundación (2020)
Excit (2005)
Paseando sin zapatos (2003)
Cómo sentir asco por el ser amado (2005)
Sueños de un director (1999)
Al Ammariya (2006)
El laberinto del minotauro (2000)
Videobook (2021)

SER O NO SER

Ser o no ser (2022)


Creación: Coral Cruz y Marta Pahissa

Reparto: Ander Puig, Anna Alarcón, Júlia Gilbert, Emma Vilarasau, Berta Galo, Lion Armas, Eduard Torres, Enzo Oliver, Nil Carbonell, Anna Bernal y Lluïsa Mallol

Temporadas: 1

Episodios: 6

SINOPSIS

Joel es un chico trans de 16 años, que decide cambiar de instituto para dejar de sentirse diferente al resto. Se matricula en bachillerato escénico y allí le acompañan sus dos mejores amigos. Lleva poco tiempo transitando y desea no sentirse alguien extraño.

OPINIÓN PERSONAL DE «SER O NO SER»

Otra nueva serie, esta vez de Rtve en la que el personaje principal vuelve a ser trans. Sinceramente me encanta el cariz que poco a poco va tomando esta sociedad. Un lugar donde podamos vernos reflejados en las historias y además, vayamos enseñando a las nuevas generaciones que todo cambia. Que no pasa nada. Que cada uno es como es y la vida sigue.

Como ya te comenté hace un tiempo, me sorprendió muchísimo la serie de Abril Zamora “Todo lo otro”. La historia de una joven trans que ha pasado la treintena y no termina de encontrar su lugar en el mundo que la rodea. Pues en esta serie de la que te hablo hoy, volvemos a tener un personaje trans que también quiere encontrar su lugar. Pero la historia es totalmente diferente. Joel es un chico trans y tiene dieciséis años; acaba de comenzar la transición no hace demasiado tiempo, pero sí lo suficiente como para poder presentarse en su nuevo instituto de bachillerato escénico como Joel, la persona que siempre ha sentido en su interior.

También te hablé de un personaje trans en “Heartstopper”, pero en esa serie aparece tan normalizado (en cuanto a cómo es aceptada en el colegio femenino)  que no rascan demasiado en su historia. Es simplemente como debería de ser.  Y por supuesto “Veneno”, aunque la historia sea bastante más turbia que la que nos ocupa hoy. Por eso, lo que hace diferente esta serie es el hecho de que sea un joven en pleno proceso de transición, con un passing lo suficientemente alto como para poder empezar a ser quien realmente se siente. Y eso es algo que no había visto hasta ahora, al menos yo.

El hecho de que Ander Puig, el protagonista, sea también un chico trans, ofrece un nivel de verdad que redondea toda esta historia. Consigue mostrarnos todo el miedo, las dudas, lo perdido que llega a encontrarse en un mundo al que quería acceder con todas sus fuerzas. Y que cuando por fin consigue sentirse parte de todo aquello, algo le devuelve a su realidad. Es un chico trans y se ha enamorado de una chica. Y su secreto choca con esa realidad.

La profesora (una estupenda Emma Vilarasau) tiene algunos de los párrafos más bonitos de la serie. No te haré spoiler, que sabes que no me gusta, pero la charla acerca del amor y la mentira que tiene con Joel entre bambalinas, es simplemente preciosa.

El resto de personajes muestran diferentes arquetipos de la sociedad, quedando muy bien delineados ya desde su inicio. Y creo que está realizado de esa forma con la intención de mostrar con trazos muy gruesos ya desde el capítulo uno, cómo son cada uno de ellos. En una serie tan corta, no llegan a poder diseccionarlos como para poder entenderlos o descubrir por qué camino personal se mueve cada uno. Por eso se les marcan dos o tres detalles “clásicos” que los ubican a cada uno de ellos en su parte de la sociedad.

Me parece tan importante conocer este tipo de historias… Saber de primera mano todos estos sentimientos, estos miedos. Las sensaciones que provoca un cambio de semejante magnitud. Pertenecer al colectivo LGTBIQ+ no te convierte en un experto en las materias que describen cada una de las siglas. Simplemente te convierte en parte de este sector que trata de abrirse paso y encontrar su espacio, como hace Joel. Por lo que observar toda esa disyuntiva, tanto del protagonista como de los que le rodean, acerca de la aceptación de ese cambio resulta muy interesante. Y eso queda muy bien reflejado en sus mejores amigos (ella feliz del cambio, él sorprendido y atraído), así como en los nuevos compañeros que conoce en la clase de teatro.

Al ser una serie nueva de este mismo año, es probable que tenga una segunda temporada, debido a la buena acogida de crítica y público que ha tenido. Pero no quería dejar de recomendártela, así somos más los que pillamos con ganas la segunda temporada, ¿no crees?

¡Que tus sueños y esfuerzos tengan recompensa cada día!


COMPAÑEROS INSEPARABLES (o la enfermedad que sacudió al colectivo)

Compañeros inseparables (1989)


Dirección: Norman René

Reparto: Campbell Scott, Stephen Caffrey, Bruce Davison, Dermot Mulroney, Brian Cousins, John Dossett, Mark Lamos, Michael Schoeffling, Mary-Louise Parker, Patrick Cassidy

SINOPSIS

Durante la década de los ochenta, una enfermedad desconocida irrumpía en el mundo. Conocida como SIDA, comenzó afectando a la comunidad homosexual. Mezcla de diferentes síntomas, la comunidad médica no sabe cómo detectarla y mucho menos, cómo combatirla. Un grupo de amigos gays trata de afrontar esta nueva enfermedad con seguridad y aplomo. Aunque no todos lo conseguirán.

OPINIÓN PERSONAL DE «COMPAÑEROS INSEPARABLES»

A llorar se ha dicho. Anoche volví a ver esta película a la que le tengo un cariño especial. No recuerdo exactamente cuando la ví (incluso podría haberla visto poco después de su estreno, a principios de los 90), pero recuerdo que me marcó bastante, porque yo sí viví aquella época, aunque fuera un crío. Recuerdo los comentarios acerca de esa nueva enfermedad, que solo afectaba a drogadictos y maricones. Un estigma que costó décadas anular. Uno de tantos.

Para comenzar a explicarte un poco esta película, debes saber que la trama gira en torno al Sida, no sobre el VIH. Hay que diferenciarlo muy bien para poder llegar a entender esta historia. Breve explicación: el VIH sin tratamiento, provoca complicaciones transformándose en Sida. En la historia que nos encontramos, no se sabe nada del VIH, por lo que directamente todas esas complicaciones derivan en enfermos de Sida, que es la fase final de la enfermedad. Esa es la razón por la que en aquellos años fallecieron tantísimas personas por esta enfermedad. Cuando se estudió el VIH, fue cuando todo comenzó a estabilizarse. Sin olvidar que esta plaga se ha cobrado la vida de más de 40 millones de personas desde 1981. Ahí es nada.

No es una película de visionado fácil. Es decir, el tema ya de por sí es bastante delicado. Puede que en algunos momentos carezca de un rigor histórico o médico, pero recuerda que se hizo cuando esta enfermedad era algo desconocido para la comunidad médica (o eso nos hicieron creer), por lo que está basado en informaciones más bien confusas. La evolución de todos y cada uno de los personajes tiene una carga dramática muy potente. Cada sentimiento, cada acción, repercute en su entorno, en sí mismos. Duele hasta el fondo del alma, el desamparo en el que se encuentran, la impotencia al ver morir a sus mejores amigos, a sus parejas, a todo su entorno. Una vida que se va desmoronando en un momento en el que comenzaban a sentirse cada vez más libres. Una mancha más a la que atacar para el sector más homófobo de la sociedad. Y lo siento, luego habrá gente que pregunte que el Día del Orgullo… ¿para qué?

Es una película sencilla a la hora de su filmación. Es decir, estamos hablando de finales de los ochenta, por lo que el método de filmación es directo, sin tanta tecnología como existe a día de hoy. Pero es que tampoco le hace falta. El recorrido de los personajes está confeccionado en pequeños bloques que abarcan diferentes momentos entre 1981 y 1989. Comienza la mañana del 3 de julio de 1981, cuando el New York Post publicó el primer artículo acerca de una nueva enfermedad que se transmitía entre hombres homosexuales y finaliza en julio del 89, con los protagonistas caminando por la playa. La historia está plagada de una humanidad pocas veces vista hasta aquella época. El miedo a perder lo que tienen, la tristeza ante un final inminente y sin solución. La descarnada realidad de luchar contra algo que no sabes cómo combatir (mejor ejemplo que el reciente Covid, no lo hay, por desgracia), pero que deseas que no llegue a tocarte de cerca. Aunque a todos ellos les toca demasiado de cerca. Y eso hace de esta una película dura, pero necesaria. Porque el pasado, y lo diré hasta que me canse, no se debe olvidar (Prep, muy bien, pero está ahí por todos los que murieron, empatía), porque el olvido causa la repetición.

Uno de los puntos a favor es la normalización del colectivo, teniendo en cuenta el año en que se filmó. El director nos muestra la vida de un grupo de amigos gays y la forma en la que cada uno de ellos afronta la llegada de esta nueva enfermedad. El miedo, la tristeza, la indiferencia, el caos. Todos tienen miedo a ese bicho que, gracias a la prensa de la época, pueden contraer por ser como son. Los que tienen todas las papeletas, y por desgracia, así fue durante bastante tiempo.

Hay que tener en cuenta que su director, Norman René, fue uno de los afectados por el virus del SIDA y falleció en el año 96 a causa de esta enfermedad. Puesto que si alguien conocía de primera mano lo que estaba sucediendo, era él, por desgracia. Un retrato intimista, sincero, crudo y cruel acerca de una época convulsa en la que al propio rechazo directo de gran parte de la sociedad hacia este colectivo, se le unió una enfermedad que asoló a miles de homosexuales durante esos primeros años de desconocimiento.

Porque al final, le pese a quien le pese, esta enfermedad NO es una enfermedad de personas homosexuales. Aunque haya muchos que así lo sigan creyendo.

¡Cuídate mucho y pasa una feliz semana!

¿Cómo afrontarías tú una epidemia de este calibre? ¡Déjame tu comentario más abajo!


LA LLUVIA ME DIRÁ QUIÉN ERES

La lluvia me dirá quién eres (2020)


Autor: Gaia Jiménez

SINOPSIS

Lluvia tiene un accidente de tráfico  en el que pierde la memoria. Rescatada por una desconocida, la protagonista comienza una nueva vida, descubriendo desde cero su entorno, del mismo modo que va conociéndose a sí misma de un modo que nunca antes había hecho. O al menos que ella recuerde. Sin la presión social a sus espaldas, conocerá lo bueno y lo malo de una vida nueva, del mismo modo que vivirá la oscuridad del pasado y la luz del futuro.

LA AUTORA

Gaia Jiménez es una escritora malagueña con varias novelas a sus espaldas. Poco se sabe de ella, solo que estudió Pedagogía en la Universidad de Málaga, que es madre y por supuesto, lo que yo como amigo suyo sé, pero no pienso contar. Otras novelas que ha escrito son “Todos los trenes que vimos pasar”, “Todas las cosas que nunca te diré” y “El banco de los secretos”, todas ellas disponibles en Amazon.

OPINIÓN PERSONAL DE «LA LLUVIA ME DIRÁ QUIÉN ERES»

Por fin otra reseña acerca de un libro. Lo cierto es que tenía muchas ganas de poder escribir un artículo acerca de alguno de los libros que tengo a medio empezar. O a medio terminar. Pero es que ha sido una época bastante intensa personal y profesionalmente, y me ha resultado prácticamente imposible leer con tranquilidad y concentrarme para zambullirme en otras historias. Pero por fin encontré el hueco para terminar esta maravillosa novela.

Había que prepararse para lo peor.

GAIA JIMÉNEZ

No voy a entrar en la relación que me une a Gaia, porque es como poco peculiar. Encimeras a medida. No digo más. Eso fue hace bastante tiempo, y quién nos iba a decir a ambos que, tras años sin saber del otro, el mundo de la literatura nos uniría de nuevo. Nuestras vidas volverían a conectar sin darnos cuenta gracias a una pasión común: la escritura. Y las redes sociales hicieron esa magia. Un intercambio de nuestros libros dio como resultado el conocer la historia de Lluvia, su camino hacia el descubrimiento y la libertad.

Como ya me conoces, no voy a hacer esta reseña de forma positiva por el hecho de conocer a la autora para darle publicidad (tampoco tengo tantos adeptos…). Porque no le hace falta, sobre todo si echas un vistazo a sus reseñas de Amazon, que serán más vistas que este blog. xD. Al igual que ocurrió con “Mi octubre eres tú”, el ser amigas no quita el mérito de un trabajo bien hecho. Y con Gaia me ha ocurrido lo mismo que con Gara. Me ha gustado mucho el viaje al que me ha invitado.

Esta historia me ha resultado algo muy diferente a lo que suelo estar acostumbrado a leer (ya sabes que soy de Stephen King) y me ha sorprendido mucho la capacidad que tiene Gaia para sumergir al lector en la vida de Lluvia desde la primera página. Con un comienzo poseedor de un hype bastante llamativo (el momento del despertar tras el accidente), nos muestra que desde ese mismo momento, las dudas, los miedos y la confusión de Lluvia solo acaban de comenzar. Con buenos giros de guion, Gaia consigue que su protagonista no pueda conseguir su meta con la facilidad que parecía esperar. Y eso suma puntos. Un buen giro. A mí me encantan (si has leído mis dos novelas, lo sabrás) y me gusta el uso de ese tipo de recursos para no permitir al lector que se acomode en la historia. Gaia lo hace y de qué forma. Muy interesante y bastante desagradable, por cierto.

La besó con pasión. Con uno de esos besos que duran la vida entera.

GAIA JIMÉNEZ

Me gusta mucho la forma de escribir de la autora. Porque se asemeja mucho a mi forma de escribir. Su prosa es limpia, clara, concisa. Carente de artificios. A mí me gusta (y por eso yo lo hago al escribir) que quien esté leyendo la historia lo entienda todo a la perfección. Hay muchos escritores y escritoras que abusan en demasía del lenguaje demasiado rebuscado. Palabras que poseen sinónimos mucho más fáciles de entender para el público, pero que piensan que les otorga una posición de cultura exacerbada. Para nada. Al menos para mí. También sé buscar sinónimos en google. Y Gaia utiliza ese lenguaje sencillo. Cercano al lector, para que todo parezca un cuento que te está contando tu mamá antes de dormir. Que nada frene esa historia que la autora nos va desvelando poco a poco. No hay nada en todo su relato que chirríe, que suene fuera de contexto. Unos diálogos intensos, cada uno de ellos con bellos mensajes que se leen entre líneas; y otros que directamente Lluvia vomita para conseguir encontrarse a sí misma.

La historia fluye con agilidad, deteniéndose en las partes que la autora quiere que disfrutemos (o suframos), evitando alargar la acción más de lo necesario. Y eso hace que sus 228 páginas no resulten tediosas, sino todo lo contrario. Una lectura ágil, directa, que merece la pena conocer y disfrutar. ¡Enhorabuena Gaia!

¿Conoces a esta autora? ¿Has leído algo más sobre ella? ¡¡Deja tus comentarios y opiniones más abajo!!